Un cura de Sevilla

Este chiste me lo ha enviado por correo electrónico, y como habla de los gaditanos me dije este va para el blog. Que guasa ha tenido el chavea que me lo ha mandado, pero bueno como aquí tenemos un humor a prueba de bomba y más guasa que él, aquí lo cuelgo para que lo leáis el final del dichoso chistecito tiene un poquito de mala uva, pero aquí estamos preparado para todo lo que nos echen…

jajajajajaajajajajajaja

UN CURA DE SEVILLA

Un cura de Sevilla auténtico, socio del Real Betis, sevillano por los cuatro costaos, costalero de la Macarena, es destinado a una parroquia de Cádiz. El cura muy ofendido le dice al obispo que el no se puede ir para Cádiz porque le tiene yuyu a los gaditanos, pero el obispo lo convence y se va. El primer domingo todos los feligreses van a la iglesia para conocer al nuevo párroco, comienza la misa, y cuando llega a la homilía el sacerdote dice:

-"Queridos hermanos, hoy voy a hablaros de Sansón y Dalila; Sansón... un hombre fuerte, un hombre enamorado de una mujer, un hombre que luchó por lo que creía, un hombre capaz de renunciar a sus principios por una mujer. De SEVILLA... sí hermanos, Sansón era de Sevilla... de Triana para mas señas, en cambio Dalila, una mujer fría... calculadora... una mujer que traiciono el amor de Sansón y le cortó el cabello despojándolo de su arma más valiosa. De CÁDIZ... sí hermanos, Dalila era de Cádiz..."

Todos los feligreses flipaos, preguntándose que le pasaba al cura, total que al siguiente domingo llegan otra vez a la parroquia y comienza la misa y cuando llega la homilía el sacerdote dice:

-"Hermanos, hoy voy a hablaros de Adán y Eva; Adán... el primer hombre que Dios creó... un hombre del que todos debiéramos sentirnos orgullosos... un tío grande... De SEVILLA... Sí señor, de Los Remedios; Eva, esa mujer que le quito la costilla a Adán..., una mujer avariciosa, tendiéndolo todo tuvo que ofrecerle la Fruta prohibida a Adán... Del BARRIO DE LA VIÑA… Eva era del Barrio de la Viña de Cádiz.

Los feligreses ya muy mosqueados van al obispado y cuentan lo que está pasando, y el obispo habla con el sacerdote y le dice que deje de decir esas cosas de los gaditanos, que esta allí para dar a conocer la palabra de Dios, y que no se vuelva a repetir.

Así que llega el siguiente domingo, y comienza la homilía y dice:

-"Hermanos, hoy os voy a hablar de la última cena...Jesús reunió a sus 12 apóstoles, Jesús un hombre con principios... un hombre que supo perdonarnos... un hombre que dio la vida por nosotros... De SEVILLA..., sí hermanos, Jesús era de Sevilla. Pues eso, Jesús estando en la última cena dijo:"esta noche, uno de vosotros va a traicionarme", todos los discípulos quedaron sorprendidos, y uno a uno comenzaron a preguntarle.

Pedro: ¿seré yo, Señor?,
Pablo: ¿tal vez yo, Señor?,
Mateo: ¿seré yo, Señor?

Así sucesivamente pasando por los 12, hasta que llegó Judas y este le preguntó: ¿Seré yo, pisha?